Howard Finkel falleció el 16 de abril a los 69 años de edad. Comenzó a trabajar en WWWF en el año 1977 como presentador, y cuando la empresa pasó a ser WWF en el año 1980, Finkel se convirtió en el primer empleado. Desde entonces, se estableció como el presentador más icónico de la empresa durante un periodo de más de dos décadas, e incluso continuó realizando apariciones esporádicas en la programación de WWE tras dejar el puesto.
En el día de su fallecimiento, se informó que Finkel murió de un derrame cerebral. Sin embargo, Tommy Dreamer desmintió esa razón y reveló más información al respecto en el programa Busted Open Radio, donde señaló que Finkel sufría una rara enfermedad cerebral genética.
"Mucha gente dijo que Howard sufrió un derrame cerebral", declaró Dreamer. "Howard no tuvo un derrame cerebral. Tenía una rara enfermedad cerebral genética. Su cerebro se estaba encogiendo y odio eso porque todo el mundo pensaba que lentamente estaba perdiendo la cabeza. Tenía sistemas similares a un derrame cerebral. No quería que la gente supiera que estaba enfermo. No quería que la gente sintiera lástima por él. Cuando lo visitaba, él estaba literalmente sentado allí viendo el partido de los Mets hasta que llegó el momento de ver la lucha libre".
"Howard estaba en mal estado. No podía, lamentablemente, ni usar un teléfono con sus manos. Nos amaba. Éramos su familia. Eso es todo lo que tenía. Le encantaba actuar frente a los fanáticos y nos amaba incondicionalmente".
Durante su intervención en Busted Open Radio, Dreamer recordó que cada vez que iba al hospital a ver a su amigo, había un papel enganchado en la pared donde se le recordaba a la enfermera la hora para ponerle la televisión para ver wrestling en vivo.
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