WWE recibe una demanda de dos de sus accionistas

El portal especializado Fightful ha informado hoy de que WWE ha vuelto a ser demandada. Los accionistas de la empresa Ryan Merholz y Melvyn Klein presentarón el 24 de abril una demanda dirigida a WWE, Vince McMahon, Stephanie McMahon, Paul Levesque (Triple H), Frank Riddick III, Stuart Goldfarb, Laureen Ong, Robyn Peterson, Man Jit Singh, Jeffery Speed, Alan Wexler y George Barrios.

En las 44 páginas del documento, Merholz y Klein acusan a la empresa de haber malgastado activos corporativos, haber realizado declaraciones falsas, no haber revelado hechos adversos, haber engañado al público inversor o haber permitido a ejecutivos vender a precios inflados parte de sus acciones personales de la empresa por valor de más de 282 millones de dólares. En la demanda también se puede leer lo siguiente acerca de los acuerdos de la empresa con Arabia Saudía:

"Los altos ejecutivos de la empresa aprovecharon el inflado precio de las acciones de WWE para vender millones de dólares de sus propias acciones de la WWE durante este periodo de tiempo. En una única venta de acciones el 27 de marzo de 2019, el director general y presidente del consejo de administración de WWE, el demandado, Vince McMahon, vendió más de 3,2 millones de acciones de WWE por valor de más de 261 millones de dólares. Esta venta se produjo cuando solo quedaban unos pocos días del primer trimestre de 2019 de la empresa, en el que los expertos sabían que se estaban experimentando malos resultados económicos y a pesar de los crecientes problemas detrás de las cámaras con los saudíes".

"WWE organizó el evento en directo Crown Jewel en Riad, Arabia Saudí. Después de que el evento terminara, salieron a la luz sorprendentes informes de noticias que afirmaban que el gobierno saudí retenía a varios luchadores de WWE como "rehenes" a modo de represalia por la decisión de McMahon de retrasar la transmisión en directo de Crown Jewel hasta que los saudíes dieron decenas de millones de dólares por pagos atrasados. Las estimaciones de la cantidad pendiente oscilaban entre 60 y 500 millones de dólares. Varios luchadores detallaron su experiencia durante el calvario en redes sociales".